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Con origen en Sudáfrica, la Daddy’s Girl es un hibrido extremadamente resistente; puede soportar un clima seco y severo, por lo que es una opción ideal para los cultivadores que no tienen mucho tiempo para dedicarlo a las plantas. Esta resistencia la hace muy fácil de cultivar y que necesite de pocos cuidados hasta el final de la floración. Siempre que reciba agua de lluvia, sol y fertilizantes, este robusto hibrido cuidará de sí mismo.

La Daddys Girl emana un aroma a cítricos con toques de almizcle; su subidón es sensacional, pero no demasiado abrumarte.

Este hibrido crece ferozmente, con un periodo de floración de 50 – 60 días. Esta planta predominantemente sativa, desarrolla unas ramas largas y elegantes llenas de pesados conjuntos de brotes. Como consecuencia, se suele recomendar colocar soportes o atar a la Daddy’s Girl a medida que crece, para impedir que las ramas se rompan bajo su propio peso.

La Daddys Girl de Kiwi Seeds es apta para su cultivo interior, exterior y de invernadero. La altura de las plantas varía entre 1 y 1.2m y su cosecha media es de 300-400 g/m2.